Decantación
Utilizando la gravedad a nuestro favor con alta eficiencia.
AGUAS EFLUENTES
4/28/20244 min read


DECANTACIÓN
La decantación es una técnica poderosa y simple que aprovecha la gravedad para separar las partículas suspendidas y los sólidos del agua, incluyendo los flóculos formados durante la floculación.
TRATAMIENTO DE AGUA
Se recomienda que las unidades de sedimentación estén directamente conectadas a sus respectivas unidades de floculación, formando un módulo de tratamiento. Así, la unidad de floculación está contigua a la unidad de sedimentación, lo que permite que el agua floculada ingrese directamente a la unidad de sedimentación sin necesidad de transporte en canales ni divisiones posteriores, evitando la ruptura de los flóculos y su posible pérdida de peso para sedimentar.


Una tecnología efectiva para el tratamiento de aguas en las plantas de tratamiento de agua potable (PTAP) son los decantadores del tipo monopirámide invertida o multipirámide con tecnología lamelar. Estos decantadores tienen tuberías cuadradas de PVC instaladas dentro de las cámaras en un ángulo de 60 grados, lo que permite una alta eficiencia con una pequeña área de ocupación. Por eso se les llama decantadores de alta tasa. Es importante destacar que, debido a su naturaleza floculenta, hay una tendencia a la agregación de partículas coloidales en la superficie de las placas, lo que hace que estas aumenten gradualmente de tamaño, se desprendan de los conductos de sedimentación laminar y posteriormente sean removidas por sedimentación gravitacional.




Para evitar que el lodo se acumule en el decantador, las descargas deben ser periódicas y espaciadas, con un intervalo no superior a 30 minutos entre descargas sucesivas. El tiempo de descarga normalmente varía de 30 a 60 segundos y puede ajustarse según la calidad del agua cruda.
Con el tiempo de operación, el lodo se acumula en el fondo del sedimentador, lo que requiere su purga. El agua clarificada fluye por la parte superior.
Se recomienta que la purga de lodos sea totalmente automática, lo que permite flexibilidad y seguridad operativa.
Si el intervalo entre descargas sucesivas es largo, el lodo tiende a acumularse en la unidad de sedimentación, lo que puede comprometer gravemente las operaciones de descarga e incluso afectar el sistema de remoción de lodo.
Los valores de contenido de sólidos esperados para el lodo descargado en unidades de sedimentación que contienen sistemas mecánicos de remoción de lodo deben estar entre el 0,5% y el 0,8%, no más del 1,0%.
Las unidades de proceso deben ser verificadas hidráulicamente, no solo para su condición de caudal nominal, sino también para su condición de caudal máximo afluente, que debe definirse en función de criterios operativos adoptados en la operación de las unidades de proceso y la planificación de la expansión de la planta de tratamiento de agua.
Es en la etapa de decantación donde se elimina la mayor parte de la turbidez presente en el agua y se pueden alcanzar valores por debajo de 1 NTU en el agua decantada. Sin embargo, algunas partículas sólidas de pequeñas dimensiones aún no quedan retenidas en la decantación, por lo tanto, se necesita una etapa complementaria: la filtración.
EFLUENTES
En el ámbito del tratamiento de efluentes, los decantadores desempeñan un papel crucial en la separación de sólidos suspendidos y la clarificación del agua residual. Se dividen principalmente en dos tipos: decantadores primarios y decantadores secundarios, cada uno con sus aplicaciones específicas y consideraciones de diseño.
Los decantadores primarios son ampliamente utilizados en la primera etapa del tratamiento de aguas residuales domésticas, especialmente en sistemas donde hay una alta carga de sólidos y una baja presencia de aceites y grasas. Estos decantadores son esenciales para la eliminación de sólidos sedimentables, lo que los hace ideales para la remoción de partículas gruesas y la reducción de la carga orgánica en el efluente tratado. La eficiencia de los decantadores primarios en este proceso es notable, ya que pueden lograr una alta remoción de sólidos suspendidos con una adecuada operación y mantenimiento.
Una consideración importante en el tratamiento con decantadores primarios es la generación de lodo. Los sólidos sedimentables se acumulan en el fondo del decantador, formando lodo que debe ser tratado antes de su disposición final. Este lodo debe pasar por un proceso de estabilización para reducir su carga orgánica y facilitar su deshidratación, lo que garantiza un manejo adecuado y seguro del residuo.


Por otro lado, los decantadores secundarios son más comunes en sistemas biológicos, como en los procesos de lodos activados, donde el objetivo principal es la sedimentación de sólidos compuestos principalmente por bacterias. Estos decantadores son parte integral de la fase de clarificación en sistemas biológicos y juegan un papel crucial en la separación de los sólidos biológicos del efluente tratado.
A diferencia de los decantadores primarios, los decantadores secundarios generalmente no requieren la adición de productos químicos, ya que la sedimentación se logra principalmente mediante la acción de la gravedad y una adecuada operación del sistema. Sin embargo, es importante destacar que el exceso de lodo generado en estos sistemas debe recibir una disposición adecuada, lo que implica procesos adicionales de deshidratación y tratamiento.
Los parámetros de diseño y dimensionamiento de los decantadores deben ser calculados cuidadosamente por profesionales capacitados, ya que cualquier error en el diseño puede afectar la eficiencia global de la planta de tratamiento de efluentes. Inversiones significativas están en juego en la implementación de estos sistemas, por lo que es fundamental contar con expertos en el campo para garantizar el éxito del proyecto.

